Por José Ignacio Vásquez*
El legado de Luisa Toledo Sepúlveda marca profundamente la lucha por la memoria, la verdad y la acción, ante los crímenes cometidos durante la dictadura y durante los gobiernos post-dictadura. Luisa, pobladora de Villa Francia nunca claudicó en denunciar las violaciones a los derechos humanos, colaborando activamente en la Vicaría de la Solidaridad; junto a su población -emblemática por su historia de combate contra el régimen de Augusto Pinochet-; en las luchas durante la post dictadura, como las estudiantiles de 2006 y 2011 y, actualmente, en la revuelta social.
La noche del 29 de marzo de 1985, agentes de Carabineros asesinaron a dos de sus cuatro hijos durante un operativo en cercanías de Villa Francia. Rafael, de 18 años, y Eduardo, de 20 años, ambos estudiantes y militantes del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) fueron baleados por los contingentes policiales. Luego, en 1988, su hijo Pablo de 25 años, fue encontrado asesinado en el Cerro Ñielol, en Temuco. Rafael, Eduardo y Pablo siempre viven en nuestra memoria.
El crimen de sus hijos motivó a Luisa Toledo, junto a su esposo Manuel Vergara, a dedicar su vida a las luchas sociales y, desde entonces, se mantuvo presente en todos los movimientos y protestas que denunciaron los genocidios de la dictadura cívico-militar.
El comunicado que difundió su familia junto a las y los pobladores de Villa Francia, despiden a Luisa Toledo Sepúlveda con un profundo mensaje que releva sus memorias: "En esta fría mañana de julio, orgullosas y orgullosos vemos partir a una mujer inclaudicable, sempiterna, imprescindible. Y aunque Luisa nos deja físicamente, su legado ha calado profundo en la historia de las y los que luchan más allá de las fronteras de este territorio llamado Chile".
En Londres 38, espacio de memorias, nos sumamos a los mensajes por su partida y recordamos a nuestra querida compañera Luisa Toledo Sepúlveda, con su palabra y su acción hacia la juventud combatiente en lucha.
"Lo mejor que se puede hacer en este momento por mí, es hacer que las cosas sigan funcionando, que todo siga funcionando. Por todos los que están sufriendo cárcel, daño ocular, físico, lo mejor que podemos recibir como regalo de parte de ustedes es que sigan trabajando y sigan haciendo lo que estaban haciendo antes afuera".
Últimas palabras públicas de Luisa Toledo, registradas en un video familiar el pasado 1 de julio.
¡Compañera Luisa Toledo Sepúlveda, presente!
*José Ignacio Vásquez es estudiante de Periodismo de la Universidad Alberto Hurtado y practicante del Área Comunicaciones y Prensa de Londres 38, espacio de memorias.
Compartimos este trabajo audiovisual realizado por nuestros compañeros de Señal 3 de La Victoria