Publicado el 08 de diciembre de 2010
Recluidos en condiciones infrahumanas, excluidos del exitismo oficial y estigmatizados por la sociedad del mercado y el consumo, 81 personas perdieron la vida en una tragedia que era evitable. Son las víctimas de la "paz ciudadana" que ha empujado a los gobiernos y al sistema judicial a meter más y más personas a las cárceles, en su mayoría jóvenes. Las cárceles se hacen insuficientes para un sistema que opta por excluir, marginar y estigmatizar a los más pobres.
La Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos solidariza con las familias de los reclusos fallecidos, mediante una declaración oficial sobre los hechos.
Nota: La declaración fue emitida antes de que se modificara el número oficial de fallecidos.