Comentaron el libro la directora del Centro Nacional de Conservación y Restauración (CNCR) y coordinadora del equipo encargado de la prospección Roxana Seguel; Simón Sierralta y Nicole Fuenzalida, ambos arqueólogos de la Universidad de Chile y miembros del Centro de estudios arqueológicos e históricos Aikén; y Karen Glavic encargada de contenidos en Londres 38, espacio de memorias.
Este libro, -que además es el primero de una nueva colección de cuadernos de trabajo que busca promover las acciones y trabajos en curso del espacio- es fruto de un esfuerzo sostenido, impulsado por Londres 38, espacio de memorias y el equipo de investigación del CNCR, que busca dar un amplio acceso a las conclusiones que ya fueran publicadas y difundidas a través de un informe técnico que contempló los objetivos, metodologías y hallazgos de este proyecto de prospección arqueológica piloto, que se realizó durante los años 2011 y 2012 en el baño que fuera usado por los detenidos y detenidas de Londres 38.
Las intervenciones estuvieron cruzadas por la pregunta respecto de la materialidad que se preserva y conserva en sitios como Londres 38: ¿Para qué investigar y buscar huellas y vestigios del pasado, en centros que han pasado por procesos intensivos de ocultamiento e invisibilización? ¿En qué puede contribuir la arqueología y la conservación en los espacios físicos que fueron usados como centros represivos? Esto, asumiendo que los aportes en verdad y justicia que puedan realizarse desde estas investigaciones siempre están mediadas por la voluntad política del poder ejecutivo y los legisladores, y la labor que realizan los tribunales de justicia respecto del esclarecimiento de la verdad sobre los crímenes del pasado.
Los expositores y expositoras recordaron la deuda que la disciplina arqueológica mantiene con la investigación de excentros de represión y exterminio, recalcando la importancia de que las nuevas generaciones de arqueólogos y arqueólogas se formen tanto en las técnicas como en las teorías requeridas para estos fines, destacando el creciente interés que es posible observar en la actualidad en estudiantes y nuevos profesionales. Junto a esto, se insistió en el carácter técnico-político de este tipo de investigaciones, subrayando que el trabajo requiere -y ha sido el caso de este proyecto- un compromiso e impulso por parte de las organizaciones que hoy se encuentran relacionadas a los sitios de memoria recuperados o en vías de recuperación.
Cabe destacar que Londres 38 se encuentra llevando a cabo las gestiones para la reposición del financiamiento comprometido por el Estado en el año 2009, para la recuperación integral del inmueble, que junto a la intervención estructural, normalización de espacios para el uso público y el desarrollo de un proyecto museal, busca realizar una prospección arqueológica en distintos espacios de la casa que representan puntos críticos para la investigación y recuperación de huellas, dado el uso que tuvieron durante el período de ocupación de la DINA. La prospección de estos espacios tiene por objetivo contribuir en contenidos a la investigación ya realizada, obteniendo nuevos datos relativos al historial de intervención del inmueble, aportando además en sus diversas formas de intervención y señalamiento a la futura museografía de Londres 38, espacio de memorias.